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Toxina botulínica

¿Qué es la Toxina Botulínica?

La toxina botulínica es una proteína purificada que se utiliza en medicina estética para relajar temporalmente los músculos responsables de las arrugas dinámicas. Su aplicación permite suavizar líneas de expresión en la frente, entrecejo y patas de gallo, proporcionando un aspecto rejuvenecido sin perder la naturalidad. Además, tiene usos médicos como el tratamiento del bruxismo, la hiperhidrosis (sudoración excesiva) y migrañas crónicas

Tiempo de recuperación

La toxina botulínica no requiere tiempo de incapacidad. Se pueden retomar las actividades diarias de inmediato, con la precaución de:
Los efectos comienzan a ser visibles entre 3 y 5 días, con resultados definitivos a los 10-14 días. La duración del efecto es de 4 a 6 meses, dependiendo del metabolismo del paciente.

Cotiza tu procedimiento

    Antes y después

    Eres un buen candidato para la toxina botulínica si...

    Si tienes alguna condición médica específica o has tenido reacciones previas a este tratamiento, consulta con nuestros especialistas antes de aplicarlo.

    Toxina botulínica clásica vs. técnicas avanzadas

    Existen diferentes enfoques en la aplicación de la toxina botulínica:

    Toxina botulínica clásica
    • Aplicación estándar en áreas de mayor movimiento.
    • Reducción de arrugas marcadas.
    • Resultados visibles en pocos días.
    Técnicas avanzadas (Baby Botox, Full Face)
    • Aplicación en dosis más bajas para un efecto más sutil y natural.
    • Técnica ideal para pacientes jóvenes o aquellos que buscan prevención.
    • Uso en zonas como cuello, escote y contorno facial.

    En TOPS, adaptamos el tratamiento a tus necesidades para garantizar un resultado natural y armonios

    Beneficios de la toxina botulínica

    Suaviza arrugas sin perder expresión facial.
    Previene la aparición de nuevas líneas de expresión.
    Procedimiento rápido, seguro y sin incapacidad.
    Resultados visibles en pocos días.
    Aplicable en tratamientos médicos como bruxismo e hiperhidrosis.

    ¿Cómo se realiza el procedimiento?

    El tratamiento con toxina botulínica es rápido, seguro y prácticamente indoloro. Se realiza en consulta y sigue estos pasos:

    1. Evaluación personalizada: El especialista analiza la musculatura facial para determinar la cantidad de unidades necesarias.
    2. Marcación de los puntos de aplicación: Se identifican las áreas clave para lograr un resultado armónico.
    3. Aplicación mediante microinyecciones: Se inyecta la toxina en los músculos seleccionados con agujas ultrafinas.
    4. Recomendaciones post-tratamiento: No acostarse ni masajear el área tratada en las primeras horas para evitar la migración del producto.

    El procedimiento dura aproximadamente 15 a 30 minutos y no requiere anestesia, aunque puede aplicarse una crema anestésica en pacientes sensibles.

    Preguntas frecuentes

    ¿Cómo minimizamos los riesgos en TOPS?

    La seguridad del paciente es nuestra prioridad. Para ello, contamos con:

    • Aplicación realizada solo por médicos certificados en armonización facial.
    • Uso de productos aprobados por entidades regulatorias.
    • Evaluación previa para descartar contraindicaciones.
    • Seguimiento post-tratamiento para garantizar resultados óptimos.

    El efecto dura 4 a 6 meses, dependiendo del metabolismo del paciente y del área tratada. Para mantener los resultados, recomendamos sesiones de refuerzo antes de que la musculatura recupere completamente su movilidad.

    El procedimiento es bien tolerado y se utiliza una aguja ultrafina. En pacientes sensibles, se puede aplicar anestesia tópica para mayor comodidad.

    Se recomienda a partir de los 25 años como prevención, pero su uso es común en personas de todas las edades que desean mejorar su apariencia.

    Se recomienda evitar actividad física intensa durante 24 horas para evitar la migración del producto.

    La toxina botulínica se aplica con agujas ultrafinas, por lo que no deja cicatrices. Puede aparecer un leve enrojecimiento en los puntos de inyección, que desaparece en pocas horas.

    Sí, es posible combinarla con otros tratamientos estéticos como ácido hialurónico, radiofrecuencia o láser, dependiendo de las necesidades del paciente. Esto permite potenciar los resultados y mejorar la textura y luminosidad de la piel.

    Si bien la toxina botulínica relaja los músculos faciales, no tiene un efecto tensor directo sobre la piel. Para mejorar la flacidez, se pueden combinar técnicas como hilos tensores, radiofrecuencia o bioestimuladores de colágeno.

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